Cómo fomentar el crecimiento intelectual y emocional en casa

Darnos la oportunidad como padres de contribuir al crecimiento intelectual y emocional en casa de nuestros hijos/as es casi un lujo al día de hoy. Inmersos como estamos en el imparable ritmo de las exigencias del mundo actual y con  nuestra atención cada vez más puesta en la información que fluye a través de las plataformas y dispositivos tecnológicos es poco lo que podemos dedicar a nuestros pequeños. Entonces, solemos descargar casi toda la responsabilidad de la formación intelectual y socioemocional de los niños en la escuela.

A continuación, compartiremos algunas ideas para reactivar el concepto del hogar familiar como principal núcleo de aprendizaje de habilidades esenciales para el desarrollo integral de los/as niños/as. En paralelo, gracias a estas herramientas, tus hijos/as guardarán en su memoria la magia de los momentos compartidos en casa.

El papel del juego en el crecimiento intelectual y emocional en casa

Durante la etapa de preescolar, el juego proporcionará placer al niño/a solo si encuentra en este elementos que le resulten interesantes. En tal sentido, su interés estará centrado en aquellas actividades en las que pueda activar todos sus sentidos (vista, oído, gusto, olfato y tacto). De esta manera, podrá experimentar y ordenar los estímulos y eventos de acuerdo a sus necesidades de comprensión. Luego, asimilará la información en todo su contexto. 

Como ves, en esta etapa el juego tiene un rol relevante porque fomenta el aprendizaje con el apoyo de objetos concretos y al propio ritmo del niño. 

En la misma línea, la conducta exploratoria es otro elemento clave en el juego, porque proporciona al interior de la mente del niño/a multitud de experiencias. Estas pueden producir distintas reacciones: agrado, desagrado, curiosidad, sentido de amenaza o reto, o bien la necesidad de desentrañar un enigma. 

Entonces, no te extrañe que tu hijo/a tenga comportamientos raros que parezcan no tener relación con el juego. Para el niño, observar con atención, tocar, oler o saborear objetos a su alcance es un modo natural de aprender. Asimismo, el juego nutre la capacidad del niño para procesar y asimilar las situaciones cotidianas de los adultos. Los asuntos sociales y familiares pueden manifestarse en sus juegos, convirtiéndose en un recurso que le permita expresar sus emociones y experimentar una sensación de control y seguridad respecto a una situación que le produzca angustia u otra emoción.

Desde esta perspectiva, para impulsar el crecimiento intelectual y emocional en casa es conveniente disponer de un espacio para que el niño despliegue sus juguetes y pueda expresar con el juego determinada situación. Y que pueda dejarlos allí para retomar el juego más tarde, hasta que termine de asimilar la situación elaborada con sus juguetes.

Lenguaje y su influencia en la zona de desarrollo próximo 

Por curioso que resulte, tenemos la tendencia a recordar con mayor frecuencia las palabras asociadas a vivencias personales específicas. De allí, que el lenguaje sea el área en la que mejor ejercemos nuestra función como padres o maestros e influimos en la zona de desarrollo próximo. Por zona de desarrollo próximo debemos entender cada aspecto en el que captamos la proximidad del niño/a al logro o su madurez para pasar al siguiente nivel de complejidad. 

A modo de ilustración, si observas que tu hijo pequeño ya puede calzarse sus zapatos, puedes pensar que ya tiene fuerza, destreza y coordinación suficiente de sus extremidades para atar los cordones. Si este objetivo lo cumple a medias, puedes apoyarlo para que aprenda a hacer los lazos correctamente. De forma progresiva, el peque irá perfeccionando sus movimientos para hacerlo bien. Identificar dichos momentos clave, para acompañarlo en su progreso es indispensable en función del éxito en el proceso de asumir el crecimiento intelectual y emocional en casa

Tres momentos para apoyar con el lenguaje en la zona de desarrollo próximo

En concreto, hay tres momentos clave en los que el lenguaje apoya a los padres o al educador para influir en la zona de desarrollo próximo. Reconocerlos y aprovecharlos ayuda al niño en la adquisición de nuevos conocimientos y habilidades:

  • Apoyado en el diálogo, puedes establecer un punto inicial, en el que validarás lo que el niño ya conoce y las habilidades que ya domina. Continuando con el ejemplo anterior: “¡Genial! ¡Ya te pones bien tus zapatos! Eres un chico muy listo.”
  • Una vez valorado el conocimiento o habilidad previa, te corresponde aportar nueva información que consideres útil para tu hijo. Podrías continuar así: “Venga campeón, ahora sólo te falta aprender a anudar los cordones. Mira cómo lo hago yo y, después, lo intentarás tú.”

Luego,  evalúa hasta qué punto comprendió el niño la información o demostración y -especialmente- cómo aprovechó la misma. Probablemente, el peque no entienda bien algunos aspectos o ideas. Enfócate precisamente en lo que no asimiló y ofrécele el apoyo necesario para que termine de aprenderlo. Incluso, es útil tener en cuenta el modo en que al peque le resulte mas sencillo aprender.

Para complementar estas ideas, te invitamos a leer nuestro post Cómo crear un ambiente que fomente la autodisciplina en niños

Promover la imaginación y la creatividad apoya  el crecimiento intelectual y emocional en casa 

Sin duda, una manifestación de la creatividad es la capacidad de expresarse libremente y con total autenticidad. Para un/a niño/a, la posibilidad de decir lo que piensa y siente, abiertamente y sin ser juzgado por adultos, es muy satisfactorio y le proporciona un sentido de autorrealización.

Más aún, ser creativos y poder producir algo basado en los sentimientos y experiencias propias es el indicador más claro de un saludable desarrollo mental.

Un recurso para apoyar esta habilidad es el dibujo. En particular, si un peque asimila la geometría podría ser capaz de percibir en una figura separaciones, envolvimientos, aproximaciones y cerramientos. Estas habilidades son las que debe adquirir para dominar la lectoescritura.

Teniendo esto en consideración, es conveniente ofrecer tiempo libre a los niños y proveerles materiales diversos: hojas de colores, creyones, pintura, plastilina, barro, arena, etc. ¡Y dejarles plasmar todo lo que ellos deseen! Actividades como estas son beneficiosas tanto para el desarrollo cognitivo como para el socioemocional.

Fortalecer la atención

Por otro lado, el desarrollo de la atención del niño en etapa preescolar se va moldeando por una necesidad de contacto material con objetos y de movimiento corporal. Si bien, a esa edad ya hablan y su lenguaje apoya la acción, su conciencia responde a una actitud egocéntrica.

Visto de este modo, para enriquecer las iniciativas de crecimiento intelectual y emocional en casa es conveniente planificar actividades que incluyan movimiento. En otras palabras, que pueda usar su cuerpo para explorar su entorno y hacer tareas y desplazarse en el espacio. Cuando no existen estímulos involucrados, aparte de la vista, difícilmente un niño podrá permanecer quieto y atento por más de 10 minutos.

Un ejemplo de actividad es hacer que el/la niño/a nombre y reconozca las partes de su cuerpo mientras las toca con sus manos. Tu función será hacer lo mismo para que se fije en ti y en tus movimientos.

Te invitamos a leer nuestro post La importancia del asesoramiento familiar en psicología educativa.

El cuento, recurso valioso para apoyar el crecimiento intelectual y emocional en casa

Ciertamente, muchos padres se decepcionan al creer que sus niños no demuestran interés en los cuentos y están inquietos durante el relato. Si esto resuena contigo, es pertinente recordar que, entre la edad preescolar y los 7 u 8 años, el niño/a está ávido/a de estímulos. Por eso, al narrar un cuento para tus peques, no dudes en utilizar recursos como los títeres, hacer las voces de los personajes en los diálogos, emplear onomatopeyas y hasta pintarte la cara. De esta forma, podrás mantener la atención y el interés de tus peques. 

Por increíble que parezca, el cuento aporta interesantes beneficios a la iniciativa de fortalecer el crecimiento intelectual y emocional en casa. Los más importantes son:

  • Enriquece el lenguaje socializado, permitiendo que el/la niño/a comprenda y aprenda a emplear el vocabulario de acuerdo con el contexto.
  • Narra una serie de sucesos y describe a diversos personajes que servirán de guía para ordenar una gran cantidad de sensaciones, a menudo complejas y contradictorias. Esto le ayuda a entender y asimilar las situaciones desagradables de la vida y que son contrarias a sus deseos. 
  • Más aún, el cuento ayuda a la regulación emocional, estimulando el razonamiento del niño sobre cómo expresar sus emociones y con qué intensidad hacerlo. Igualmente, las narraciones plantean situaciones que sirven de base a esa expresión y contribuyen a darle forma, descartando la negación y la autocensura. Le permite entender que las emociones no son ni buenas ni malas, que tienen un objetivo en ciertos momentos de la vida y que pueden regularse.

Apoyamos tus iniciativas de formación intelectual y emocional en casa

En Educadamente, nuestro objetivo es hacer aportes valiosos al conocimiento y desarrollo personal de niños, adultos, mayores y de toda la familia.

Proporcionamos programas de formación de alta calidad para niños en Primaria, Secundaria y Bachillerato. También, ofrecemos diversos módulos de instrucción para adultos que necesitan enriquecer sus vidas mediante el aprendizaje de idiomas, tecnología, diversas áreas de especialización o la adquisición de herramientas efectivas para criar a sus hijos.

Por todo esto, proporcionamos un apoyo sólido a tus iniciativas de fomento del crecimiento intelectual y emocional en casa.

¡Educa tu mente, aprende, juega, mejora tus resultados y diviértete!

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